Brenis se fue con Dios esperando una llamada del presidente

Brenis Abigail Muñoz Villalona, bebé de siete meses que requería trasplante hepático.

JUEVES, 15 AGOSTO, 2024: «Nosotros no estamos pidiendo más nada señor presidente, nosotros lo que queremos es… que nos ayude con la causa de mi niña», señaló con voz entrecortada Erickson Antonio Muñoz Castro, refiriéndose a la solicitud que habían hecho él y su esposa al presidente Luis Abinader, para tratar la condición médica de su hija Brenis Abigail Muñoz Villalona.

Es triste decirlo, pero el reloj le ganó a mi pluma. Al redactarse estas líneas, las cuales se hacen entre lagrimas, indignación e inconformidad con los procesos burocráticos de nuestro país, no han transcurrido 24 horas de que quien suscribe, junto a Félix -Keki- Vargas y Estrella Gutiérrez, nos trasladamos a la humilde localidad de Yabacoa, en el municipio Arenoso, provincia Duarte, donde en vídeos documentamos la historia de la pequeña de siete meses, cuya ida a destiempo no nos permitió subir el trabajo, porque partió la madrugada de este miércoles a la paz del Señor.

Pareciera una historia sacada de un libro, una novela o un cortometraje de Netflix, o que, simplemente estamos tras la búsqueda de remover una herida que nunca va a sanar, causando conmoción y dolor a quienes ya lo han vivido en carne propia, porque la intención de dar a conocer la odisea de Breiny, responde a un llamado del periodista santiaguero José Adriano Rodríguez, quien el 22 de enero del presente año, perdió a su pequeña Sharally Rodríguez Liz, y buscaba evitar que Erickson y su esposa Anyara Villalona viviesen su situación.

«Le pidamos a Dios que nos de fuerza y fortaleza, y le de fuerza y fortaleza a mi hija», precisó el joven de 29 años, aferrado a la fe de que su vástago podía llegar a realizarse la cirugía de trasplante hepático pediátrico con donante vivo relacionado, para la cual era compatible, solo le faltaban los recursos económicos y poder viajar a Argentina, lugar donde se realizaría el proceso.

Sobre el trasplante

La cirugía tenía un costo de US$110,000 dólares, de los cuales la Fundación Ethe, una organización experta en medicina de alta complejidad, le había aprobado un donativo de US$10,000 dólares. La parte restante la solicitaron a la Presidencia de la República Dominicana, en una comunicación de fecha 15 de julio del presente año.

Desesperados por salvar la vida de Brenis Abigail, el 7 de agosto de 2024, sus padres también dirigieron una comunicación al despacho de la primera dama Raquel Arbaje Soni, no obstante a eso, el pasado viernes, Benjamín Muñoz, un regidor de la zona hizo entrega personal del expediente médico al presidente Luis Abinader en su visita por San Francisco de Macorís, cuentan los padres.

Las reacciones de la niña

«Ella vomita la sangre y después vomita otro coagulo», manifestó el padre refiriéndose a las reacciones que sufría su hija fruto de su cuadro de atresia de vías biliares sin derivación portosistémica tipo KASAI.

El humilde ebanista y su esposa habían agotado todos sus recursos económicos, pero mantenían viva las esperanzas y la fe, de que podían recibir una llamada de la presidencia para notificarles que cubrirían los gastos relativos al proceso quirúrgico, y así prolongarle la vida a su pequeña.

La desesperación de la joven pareja aumentó cuando el miércoles de la semana pasada, la doctora que atendía a Brenis en la Plaza de la Salud en Santo Domingo, les dijo que había que hacerle el trasplante cuanto antes, porque no podía esperar más tiempo.

«La doctora me dijo a mi la semana que pasó que la niña había que hacerle el trasplante, que muy difícil que ella aguante el tiempo», acotó muy triste el padre.

La pequeña Abigail recibió un tratamiento de alto costo, cuyo monto ascendía casi a los dos millones de pesos dominicanos, pero no tuvo éxito, contó su madre Anyara Villalona, quien embargada por tristeza abrazaba y sobaba a su hija, tratando de persuadir el dolor al que la sometían dos hernias (una en su ombligo y otra en su parte intima).

Es larga la dolorosa historia de esta familia, cuyas palabras no existen para redactarla completa. Pedimos a Dios darle la fuerza, el valor y la fe para soportar este duro proceso, el cual se suma a la lista de casos en espera que quedan en los archivos de solicitudes de ayudas y que son un reflejo doloroso de las dificultades que enfrentan muchos en la República Dominicana cuando se trata de acceder a la atención médica especializada.

Por: Rolfi Rojas