Abandono y Vandalismo: Símbolos Históricos de Barahona en peligro

Por Solimar Betances

EN BARAHONA, (Repùblica Dominicana), martes 23 julio, 2024:  El periodista Carlos Julio Féliz ha manifestado su preocupación por el estado alarmante de deterioro y abandono del Parque Central de Barahona, hogar de numerosos símbolos históricos de la ciudad, situación que ha provocado consternación e indignación entre los residentes y visitantes.

Uno de los elementos más icónicos, el reloj público, permanece detenido en el tiempo, mientras que la sirena, que solía anunciar la hora, ha dejado de funcionar, privando a la comunidad de un recurso valioso; hasta ahora, no se ha informado cuando será restablecida.

Cabe destacar que estos símbolos históricos, incluidos el reloj y la glorieta del parque, fueron donados por el altruista Luís E. Delmonte, cuya memoria está siendo empañada por el deterioro. 

La glorieta, en particular, está en un estado tan precario que amenaza con desplomarse, mientras que la estatua en honor a Delmonte ha sido vandalizada, con la placa arrancada y la nariz destrozada.

Además del vandalismo, el parque sufre de una notable falta de iluminación, con muchas áreas sumidas en la oscuridad, lo que incrementa la sensación de inseguridad y descuido.

Otra estatua, erigida en honor al limpiabotas más viejo de Barahona, también se encuentra en un estado igualmente lamentable, rodeada de botellas de cerveza.

De igual modo, el mural en honor al maestro Ramón Oviedo, un orgullo del arte pictórico nacional y nativo de la provincia, muestra parte del texto borrado, un triste recordatorio de la desatención que sufren estos monumentos.

Es importante resaltar que la Banda de Música Juvenil local ofrece fabulosos conciertos todos los domingos, reviviendo la tradición y llenando el aire de música, sin embargo, la preocupación persiste, ya que muchos temen que la glorieta no aguante mucho más tiempo sin una intervención urgente.

La comunidad de Barahona clama por acciones inmediatas para restaurar estos símbolos históricos, que no solo representan el pasado glorioso de la ciudad, sino que también son parte esencial de su identidad cultural y patrimonio.